El Ajo

El cultivo se hace a partir de un diente de ajo, y no de una semilla. El diente de ajo deb enterrarse con la punta hacia arriba. Es un cultivo no demasiado exigente en cuanto a sus nutrientes y el agua. Lo bueno es que se puede cultivar en cualquier época del año, pero sugerimos evitar hacerlo en los meses que son muy calurosos .

Se puede cosechar cuando las hojas aún están verdes o esperar a que se sequen
las mismas para obtener una cabeza de ajos completa.

Esta hortaliza contiene muchas propiedades medicinales. Es un cultivo muy sencillo que ocupa poco espacio y no suelen tener problemas de plagas.

La Cebolla

Es un cultivo que se adapta facilmente al cultivo en macetas porque tiene raíces muy poco profundas. Es poco exigente en cuento al agua y nutrientes y se cultiva bien durante todo el año.

La cebolla y el ajo van a ser un buen precedente, dentro de sus rotaciones,
de plantas exigentes en nutrientes, y esto se debe a que tienen la capacidad de enriquecer el sustrato gracias a las micorrizas asociadas a sus raíces.

La cebolla no suele tener problemas de plagas.

Frutillas o Fresas

La frutilla o fresa, como comunmente es denominada en muchos países, es la única fruta que se puede adaptar perfectamente a una huerta en nuestra casa, ya que al tener un formato chico es una planta de pequeño porte.

Es un cultivo plurianual. El mismo se reproduce por estolones, osea que sus tallos horizontales, al momento de que tocar el suelo, van a producir una nueva planta, y estas nuevas plantas a su vez se pueden trasplantar.

Las frutillas se formarán durante la primavera. Son cultivos que, a nivel nutricional, contienen una abundante proporción de vitamina C, son antioxidantes.

Sugerimos para su cosecha, hacerlo en el horario de la mañana, cuanto más temprano sería mejor, porque es cuando tiene intacta todas sus propiedades antioxidantes.

Pueden tener algún que otro problema de virus, lo que causaría que se extienda a toda la planta.

El Rábano

Es un cultivo de ciclo corto, el cual se siembra directamente. Se caratcteriza por ser un cultivo muy sencillo que ocupa poco espacio y que se asocia bien con otras hortalizas.

Se puede cultivar practicamente durante todo el año, pero sugerimos evitar hacerlo en los meses calurosos o muy fríos.

El Pepino

El pepino, al igual que la calabaza, el melón o la sandía, tienen un gran desarrollo por la tanto requieren de mucho espacio.

Si bien el pepino se adapta bastante bien al cultivo en macetas porque sus raíces no son demasiado largas, es una planta que crece mucho y para evitar que se haga rastrera ocupando mucho espacio, sugerimos proporcionarle un rodrigón para que pueda trepar con sus zarcillos.

Es un cultivo de primavera y/o verano, siendo muy exigente con el agua, por el tema del riego y también en horas de sol. Nos va a proporcionar constantemente pepinos durante todo el verano.

En cuanto a su cocecha, sugerimos que los frutos sean retirados cuando estén verdes, o sea que estén inmaduros, porque si los dejamos demasiado tiempo tienden a hacerse amargos.

Es bastante común que al final del verano le afecte al oídio, esto lo sabremos si le van apareciendo manchas blancas en las hojas.

También pueden atacarle plagas de pulgón y mosca blanca, aunque no suelen ser
problemáticas.